El turismo del vino, una realidad en auge
- Detalles
Una tendencia que no dejará de crecer
Son muchos los amantes del vino y cada vez son más los que planifican un viaje alrededor de este, de su origen, de su esencia. Es el auge del turismo del vino.
El vino tiene la virtud de levantar pasiones y ahora tenemos la posibilidad de descubrir el porqué. Se han abierto de par en par las puertas de bodegas, viñedos y sus fincas, muchas ahora reconvertidas en hoteles rurales o agroturismos.
El cliente amante del vino no busca únicamente la cata de caldos sino que también esta deseoso de conocimientos, de lugares tranquilos, de remansos de paz, de naturaleza y de gastronomía.
Todo eso lo encuentran hoy en día en las bodegas y explotaciones que no hace tanto se dedicaban exclusivamente a eso, a la explotación de viñas para la producción de vino y que ahora han ampliado horizontes y servicios y completado así una oferta turística única y exclusiva.
Los amantes del vino, los aficionados, los interesados o, incluso aquellos que aún no han descubierto este “mundo” saldrán satisfechos de una experiencia como esta, la del turismo del vino.
Se descubre de primera mano los vinos de la bodega, la uva que se utiliza, las cepas, la tierra y el entorno. Se descubre hasta donde cada uno desea. Mera información, explicación sutil o profundización en la materia para los más deseosos. Cada cliente tiene unas pretensiones, unas peticiones y unas exigencias.
Puedes conocer de primera mano la bodega, su historia, su filosofía y su porqué. De esta forma te puedes sentir más partícipe de la experiencia de degustación de sus caldos, más próximo a su cultura y, por consiguiente, más integrado en el entorno.
Los clientes ávidos de información y cultura vinícola ganarán conocimientos viviendo experiencias enriquecedoras en primera persona y descubriendo, en muchos casos, los procesos de preproducción, producción y postproducción de este sector. Por el contrario, los que se inician en este apasionante mundo del vino podrán descubrir nuevas sensaciones y emociones ya que se trata de un tipo de turismo muy cercano y en constante contacto con la naturaleza y el producto.
Bodega Can Feliu ofrece a sus clientes la posibilidad de conocer la bodega, sus viñedos, realizar catas y eventos privados y degustar barbacoas en un entorno inmejorable. Además, Can Feliu cuenta con agroturismo propio donde pasar unas vacaciones inolvidables en familia o amigos y conocer de primera mano el mundo del vino.